Cittadinanza Iure Sanguinis
Principio clave del derecho 5 de febrero de 1992, n. 91, relativo a la adquisición de la ciudadanía, es el del ius sanguinis, basado en el art. 1, según el cual el hijo de padres ciudadanos es ciudadano italiano por nacimiento. Esta es la ciudadanía jure sanguinis.
En aplicación del principio de ius sanguinis, el descendiente de un emigrante italiano, que no haya obtenido la ciudadanía extranjera, puede a su vez reclamar la ciudadanía italiana jure sanguinis. De esto se deriva la posibilidad concreta de que los descendientes de segunda, tercera y cuarta generación, y más allá, de los emigrantes italianos, sean declarados ciudadanos italianos por filiación.
Los casos de descendientes directos de italianos se conocen como Ciudadanía Iure Sanguinis, lo que significa que se transmiten por sangre. Dado que son considerados italianos desde el nacimiento, los descendientes deben "recolectar" toda la documentación necesaria para poder solicitar la ciudadanía.
Es un proceso mediante el cual debemos demostrar nuestra identidad mediante documentos como registros de nacimiento, matrimonio y defunción.
Son originarios de Italia (por nacimiento o Iure sanguinis):
Personas nacidas hasta el 31 de diciembre de 1947: si el padre del solicitante era ciudadano italiano al momento de su nacimiento.
Las personas nacidas después del 1 de enero de 1948 deben tener en cuenta si su padre o madre era ciudadano italiano al momento de su nacimiento.
No hay restricciones en cuanto al número de generaciones que se transmiten para obtener la ciudadanía italiana, ni si los ascendientes viven o han fallecido.
Limitaciones: • La fecha en que falleció el ascendiente italiano.
La fecha en que los antepasados italianos emigraron.
transmisión genética, posible pérdida de la ciudadanía italiana por parte de los ascendientes.
Después de que el Reino de Italia se proclamara el 17 de marzo de 1861, el italiano debería haber muerto. Sin embargo, si la comuna de origen de un italiano fue anexada al Reino de Italia después de esa fecha, el ascendiente italiano debe haber fallecido después de la anexión.
El derecho de los hijos legítimos es igual al de los hijos naturales para obtener la ciudadanía italiana. El reconocimiento por parte de un ciudadano italiano, la declaración judicial de filiación de un ciudadano italiano o, en el caso de hijos no reconocibles o "incestuosos", la declaración judicial del derecho an alimentos conllevan al reconocimiento de la ciudadanía italiana a partir del nacimiento, si se verifican durante la minoría de edad del hijo. El acta original del reconocimiento o la sentencia deben confirmar lo mencionado. Los hijos mayores de edad que reciben el reconocimiento deben expresar su deseo de obtener la ciudadanía italiana dentro del año en que se les reconoce.
Requisitos para la ciudadanía Iure Sanguinis
Para obtener la ciudadanía italiana ius sanguinis se necesitan dos requisitos básicos:
- ascendencia de un súbdito italiano, es decir, el otorgante (el antepasado emigrado);
- la ausencia de interrupciones en la transmisión de la ciudadanía; es decir, la no naturalización extranjera no sólo del antepasado italiano, antes del nacimiento del hijo, sino también de sus descendientes en línea recta, antes del nacimiento de la siguiente generación, hasta el propio solicitante inclusive. En esencia, es necesario demostrar que la cadena de transmisiones de ciudadanía nunca ha sido interrumpida.
